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| Nombre | Valoracion | Comentario |
| Irene PH | 5 | MUY RECOMENDABLE, de los sitios que te apuntas para tus familiares cuando vengan de viaje por la zona . Calidades buenísimas. Siempre está concurrido, se aconseja reservar para asegurar mesa. Nosotros llegamos muy pronto sin reserva con nuestro perro y por suerte pudimos probar el tomate rajado (carnoso, pelado y con el sabor huerta de verdad y no el plástico que casi siempre comemos), gambita blanca cocida (cocida en su punto respetando el producto), croquetas de la casa (de jamón y puchero de las mejores que he probado) lubina a la brasa (este plato es para dos y es ESPECTACULAR). |
| Daniel Robles | 4 | 8/10
El local está muy bien cuidado y decorado. Un sitio perfecto casi a pie de playa. En cuanto al servicio muy correcto y rápido, mucho personal, atento, pero quizá algo distante. La comida no estaba mal, pero quizá se q\\uedaba siempre un puntito por debajo de las expectativas. La presentación muy buena, y de sabor correctos. Pedimos el canelón de aguacate, al que le faltaba algo de sabor; el matrimonio de sardina y antxoa, que la verdad dejó mucho que desear, de los más flojo de la comida. Seguimos con media ración de choco, que estaba bien, pero tuvimos que pedir una salsa extra ya que venían sin nada. Continuamos con la presa ibérica, que aunque estaba buena, también estaba algo pasada. En cuanto a los postres; el tiramisú de mango correcto, pero la tarta de queso se quedo muy atrás, tanto por sabor (no sabía a queso) como por cantidad (tamaño de típico flan de menú del día para un postre de carta). El coste total fue de unos 52€, en este aspecto luces y sombras, ya que por ejemplo los postres y los entrantes nos parecieron que estaban muy por debajo de su precio, pero los otros platos estaban muy bien. Destacar que el servicio cuesta 1$00275€ y te incluye 4 raciones de panes de muy buena calidad y degustación de aceites muy buenos. En general, una experiencia correcta, pero mejorable. Recomendable. |
| Puri Iglesias | 5 | Me alegro de haber dado con este magnífico restaurante de casualidad». Si pasas por Mazagón, la visita es obligatoria, ya que sus platos te sorprenderán. Todo lo que comimos estaba riquísimo. La atención y profesionalidad de los camareros también la quiero recalcar. Felicito desde aquí a los cocineros y a cada profesionalidad que nos hace de su estancia, algo inolvidable. Gracias. |
